Wadi Musa es la ciudad mas cercana a Petra. Alrededor del pequeño centro que forman el mercado y la estación de autobuses, alberga numerosos hoteles y restaurantes, algunas tiendas, bancos y una oficina de Western Union con mejor cambio que en el aeropuerto. Hay autobuses cada día hacia Amman y Aqaba, y la mayoría de los hoteles organizan viajes al Wadi Rum.

Desde el siglo VI ac
Petra fue la capital del reino nabateo, y debido a su idónea ubicación en un valle fácil de defender, con suministro garantizado de agua, y atravesado por la ruta de caravanas, prosperó rápidamente. En el año 106 es absorbido por el imperio romano, con quienes continúa floreciendo hasta el catastrófico terremoto del año 663 que destruyó numerosos edificios y la mayoría de los sistemas de riego. Este hecho, unido al cambio de las rutas comerciales, condujo a su casi total abandono y olvido tras el periodo bizantino. Hasta que en 1.812 Johann Ludwig Burckhardt disfrazado de árabe entró en la ciudad, ocupada por los beduinos, y redescubrió Petra para el mundo occidental.

Las
entradas durmiendo en Jordania (lleva tu pasaporte para demostrarlo) cuestan 50/55/60 JOD por un pase de 1/2/3 días. No durmiendo en Jordania 90 JOD/ día. No hay descuento para estudiantes. Tras comprar la entrada en el
Visitors Center el acceso es caminando, aunque para el largo camino hasta el Tesoro puede alquilarse una calesa e incluso un caballo, un camello en la zona del valle y burros para ascender las empinadas cuestas, todos a precios negociables. Hay algún puesto de souvenirs y refrescos en el Tesoro, y restaurantes en Qasr al-bint y el Monasterio (3 JOD un zumo fresco de limón con menta), pero en general escasea la venta de agua o comida, mejor llevar algo desde Wadi Musa.


Petra era una ciudad aislada. La entrada se realiza a través del
Siq, un estrecho y profundo cañón de 1.500 mts de longitud rodeado de acantilados que se elevan hasta los 80 mts de altura. Al final de él, una estrecha grieta nos vislumbra el monumento mas famoso del país, Al-Khazneh (el
Tesoro), una impresionante tumba del siglo I con una inmensa fachada de 30 m de ancho y 43 mts de alto. Aquí empieza la
calle de las fachadas, una sucesión de casas y tumbas (mas de 40) muy similares a las cientos que hay repartidas por todo el complejo arqueológico, pero estas son fácilmente accesibles. Tras las tiendas y antes de llegar al teatro, unas escaleras a la izquierda inician una dura subida de cientos de peldaños esculpidos en la roca hasta el
Altar de los Sacrificios.


En lo alto de la colina, entre dos grandes
obeliscos dedicados a algún dios nabateo y un socorrido puesto de refrescos con terraza, desciende un camino hasta
Qasr al-bint, el principal templo de la capital nabatea, y único edificio no excavado en roca que ha sobrevivido a siglos de terremotos e inundaciones. Junto a él hay una pequeña zona de restaurantes y aseos. Desde allí se inicia una larga ascensión de 900 escalones con fantásticas vistas del valle, hasta Ad-Deir, el
Monasterio. Importante lugar de peregrinaje al que se subía en modo de procesión, su fachada de 45 mts de altura perfectamente encajada en la montaña, es tan impresionante como el Tesoro aunque este menos elaborada. Durante la ascensión abundan los burros con turistas perezosos o en baja forma.


De nuevo en Qasr al-bint iniciamos el regreso. Tras la
Puerta del Temenos se accede a una
calle columnada romana que acababa en un
ninfeo (fuente pública) del que apenas quedan restos. Frente a él están las
tumbas reales, llamadas así debido a su colosal tamaño y que albergaban en su mayoría restos de reyes, nobles, gobernadores y miembros de la elite nabatea y romana. Tras ellas un
teatro romano del siglo I excavado en roca y diseñado en gradas de tres niveles que tenía una capacidad para 3.000 personas. Aquí empieza la calle de las fachadas que lleva al Tesoro, al Siq, el
Visitor's Center y desde allí a Wadi Musa. Total 8h caminando.
El tiempo necesario para recorrer las ruinas varia en función del calor, la exhaustividad de la visita y la condición física de cada uno. Subir al Altar de los Sacrificios, al Monasterio, y un paseo por la calle columnada y las tumbas reales andando a buen ritmo, nos ha llevado 8h a 28º de temperatura parando 20 minutos para comer unos bocadillos. Si a esto le añadimos 10º-15º (fácil en verano), una comida mas sosegada y acceso al interior de las tumbas, mejor dedicarle dos días repartiendo las ascensiones.

Rocky Mountain, 25 JOD. Hab. doble con baño y agua caliente, aire acondicionado, calefacción, desayuno incluido, té y café gratis todo el día, wifi en áreas comunes, y transporte gratuito a Petra. Mucha mejor calidad que en Amman, ambiente cuidado, silencioso e impresionantes vistas desde sus terrazas. Organizan excursiones al Wadi Rum. Gestionan también
Seven Wonders Camp, un
bedouin camp a 15 min de Wadi Musa, donde cenamos un excelente buffet bajo las estrellas por 10 JOD (transporte i/v inc).
Al-Wadi Rest, céntrico, en Shaheed Circle. Comida árabe y occidental a buen precio. Nos encantó la comida vegetariana, pero el
mansaf era mejor en al-Jabri (Amman).
Al Yakhor Hammam, 15 JOD. Bonito local ideal para después de un agotador día en Petra, sauna, baño de jabón,
scrubbing y masaje, entre 60-75 min. La vida nocturna es escasa, y solo unos pocos bares del
downtown, próximos al
Petra Clients Center venden alcohol, 3,5 JOD cerveza/vodka y 12 JOD medio litro vino.