Vianden es una pequeña población de unos 1.500 habitantes situada en el fondo del valle que forma el río Our. Durante la edad media sus artesanos destacaron como orfebres, cerrajeros, albañiles, curtidores y tejedores, siendo el tintado de cuero extraído de cerdos criados localmente, su principal industria hasta mediados del siglo XX. Es un pequeño pueblo de calles empedradas y casas de colores pastel con tejados de pizarra, con numerosos atractivos, como la iglesia parroquial construida en estilo gótico en 1248, el Museo de Arte Popular ubicado en una antigua mansión, o el
Musée Littéraire Victor Hugo ubicado en la casa donde vivió Victor Hugo durante su exilio en 1871, y que ahora alberga una colección de documentos, escritos y dibujos de sus diversas visitas a Vianden y al país. Además desde el pueblo sale una gran red de rutas de senderismo perfectamente mantenidas y señalizadas, que ofrecen acceso a una naturaleza prácticamente virgen.
Pero su principal atractivo es un majestuoso castillo medieval, situado en lo alto de una roca a 300 mts sobre el pueblo. Aunque los primeros asentamientos en la zona datan de la época romana, la construcción del
castillo (acceso 7€) no comenzó hasta el siglo XI, que pronto se convirtió en la residencia de los Condes de Vianden. En 1820, el rey Guillermo I, habiendo perdido su interés en Vianden y su castillo, vendió la fortaleza a un comerciante local, que vendió su interior como chatarra: los azulejos del techo, los paneles de madera, las puertas y las ventanas pieza por pieza, dejándolo en un estado ruinoso. Tal fue el expolio, que el monarca lo volvió a comprar siete años más tarde con la intención de restaurarlo, pero la convulsa historia europea de los siguientes 150 años, retrasaron hasta 1962 el inicio de una restauración completa que duraría 30 años, y que nos permite admirarlo tal como lo vemos hoy.
Siguiendo uno de los márgenes del río se llega hasta un telesilla (4,80€ ida y vuelta), que en un corto trayecto de diez minutos sobre el río y el bosque, se eleva 450 mts hasta un mirador con restaurante, ofreciendo unas vistas fantásticas del valle, el pueblo y el castillo.
En los márgenes del río y la Grand Rue, calle principal del casco antiguo que va desde el puente sobre el río Our hasta el castillo, abundan los hoteles, bares y restaurantes con ofertas para comer desde 12€ el menú. Nosotros nos sentamos en la terraza del
Café Hotel de Ville de Bruxelles, un establecimiento que data de 1579, donde tomamos un menú de pasta, postre y cerveza, por 26€ para dos personas.
No hay autobuses directos desde Luxemburgo a Vianden. Lo mas fácil es coger en la Gare Central un tren hasta Ettelbruck o Diekirch, pasan cada media hora y tardan unos 30 minutos. Al bajar del tren, frente a la estación, tomar el bus 570 que hace un recorrido de unos veinte minutos por varios pueblos, antes de dejarnos en el puente de Vianden, junto a la Grand Rue. Desde allí hay quince minutos andando hasta el castillo. Visitar
Mobilitetis Zentral para consultar horarios de tren y autobús.