De Braga dicen que es la ciudad más religiosa de Portugal. En el medievo rivalizó con Toledo y Tarragona como centro de poder católico en la península, dejando numerosas iglesias repartidas por toda la ciudad y un impresionante Palazio arzobispal.
08:20 Coimbra Coimbra B Braga (1h56). Decido no madrugar y me sale caro. El tren es un Alfa Pendular muy cómodo, con tv y servicio de desayuno, pero cuesta 19€. Y es que "a quien madruga Dios le ayuda".
En Braga, seguir la calle frente a la estación, pasar bajo el
Arco da Porta Nova y 500 mts después llegamos a la
Pza da Republica, centro turístico de la ciudad.
Hotel Residencial, 28€. Av. Central, 27. Hab. grande con dos camas, moqueta, calefacción, tv y baño completo. Desayuno incluido. A recepción, en la segunda planta, se accede con el ascensor de las Galerías
BragaShopping. La
avenida Central, es un ancho paseo arbolado, lleno de esculturas y bancos para sentarse bajo los árboles. Frente al hotel se encuentra la
Igreja dos Congregados, un monumental convento de estilo rococó, y junto a él ocupando el antiguo claustro la Universidade do Miño.
Praça da República es una enorme plaza peatonal desde donde parten las principales calles peatonales y comerciales del casco histórico. En su centro hay una enorme fuente de chorros de agua, y frente a ella un edificio conocido como
Arcada,
debido a los arcos y soportales que presenta en su planta baja. Fue mandado construir en el siglo XVI por el arzobispo Diego de Sousa, y su función era facilitar el paso de carruajes y mulos que traían las mercancías a los mercaderes desde la rúa do Souto. Entre la Arcada y la
Iglesia de Ntra. Sra. De Lapa, una pequeña iglesia cuyas paredes interiores están cubiertas de azulejos en tonos azules y blancos, se encuentra la
Torre de Menagem, únicos restos de un palacio del siglo XVIII mandado construir por el rey Dinis, de quien luce su escudo en la fachada. Es una torre almenada de planta cuadrada y 30 metros de altura, con tres plantas que ahora son utilizadas como sala de exposiciones.
Bajando Rúa do Anjo paso frente a la Casa dos Crivos hasta la Igreja de Sta Cruz, con su espectacular fachada
barroca en piedra labrada, y la Igreja do hospital de San Marcos, fundado por Diego de Sousa en el año 1.508 como centro asistencial y de caridad, que comparten el Largo Carlos Amarante. En el centro hay una fuente de granito en forma de flor, rodeada de un pequeño espacio ajardinado y algunos bancos de piedra. Tras ella, junto a la Lonja de la ciudad, el Palacio do Raio (considerado uno de los más bellos palacios rococó de Europa). Bajando la calle Hospital encontramos la popular capilla de S. Bentinho da Porta Aberta, llamada así porque siempre tiene sus puertas abiertas. De planta octagonal, en su interior la paredes están revestidas de azulejos y hay un pequeño altar dedicado a San Benito, de quien hay una pequeña estatua en el tejado.
Cruzando una de las antiguas puertas de la ciudad accedemos a un plaza donde se encuentra la
Capela de Nossa Senhora da Torre levantada como recompensa a la Virgen por haber ahorrado a la ciudad la devastación del terremoto de 1755, y la
Igreja de São Paulo, construida por los jesuitas en 1589, sobria y simple, pero con un lujoso barroco interior y magnificas tallas de madera en los altares.
El centro de la empedrada
Largo de Sao Joao do Sauto lo preside un espectacular
cruzeiro rodeado por un pequeña zona ajardinada. Rodean la plaza viejos hostales y cafeterías, y dos edificios declarados Monumento Nacional la Igreja São João do Souto y la Capela e Casa dos Coimbras.
El
Arco da Porta Nova era la antigua puerta de muralla que desde 1512 da acceso a la rúa do Souto. Tras la reforma de 1772 diseñada por Andrés Soares ofrece un lado exterior rococó y otro interior neoclásico. Siguiendo la rúa de Matadouro se encuentra el
Convento do Pópulo, la
Camara Municipal y el
Palacio dos Biscainhos donde hay un modesto museo de pintura Barroco y Rococó.
En pleno casco histórico peatonal se encuentra
Se Primacial, la catedral, declarada Monumento Nacional y considerada uno de los templos mas importantes del románico portugués.
Fue levantada sobre una mezquita árabe en 1070, donde sobre una base románica fueron añadiendose aportaciones en los periodos gótico, barroco y renacentista. En su interior techos abovedados decorados con frescos, una preciosa sillería del coro en madera tallada, dos espectaculares órganos de tubo del siglo XVIII, y la Capela dos Reis del siglo XIV, en cuyo interior está enterrado entre otros el Arzobispo Lourenço, que cuenta la leyenda que fue encontrado sin cambio aparente cuando abrieron su tumba en el siglo XVII. Además el Tesouro de la Catedral, donde hay una exposición permanente sobre la historia del templo y la ciudad de Braga, es uno de los más importantes de su clase.
La
Rúa de Souto, la principal calle comercial del Braga histórico, recorre el camino entre la Torre del Homenaje y el Arco da Porta Nova. Se trata de una amplia calle peatonal, donde se pueden encontrar todo tipo de comercios, desde moda hasta vinotecas, librerías, perfumerías, decoración y hogar, y las típicas tiendas de artículos religiosos de la ciudad. Más o menos hacia la mitad del recorrido, frente a la Iglesia de la Misericordia, la calle se ensancha formando la pequeña plaza empedrada de
Largo da Paço, donde se encuentra el Palacio de la República Bracarense. En el centro hay una fuente en la que es tradición que los novatos de la Universidad sean bañados al comenzar el curso escolar.
En la misma
Rúa de Souto, enfrente de la Catedral, está el
Antigo Paço Episcopal, una inmensa mole que hoy cobija la
Biblioteca Municipal y algunas facultades de la Universidad. Por el otro lado se encuentra el
Jardim de Santa Barbara, una
plaza rectangular donde varios caminitos rodeados de parterres convergen en una fuente de piedra hexagonal coronada por la estatua de Santa Bárbara. En uno de sus extremos se hallan las ruinas de la muralla medieval. Bajando la Av. Liberdade, una amplio paseo semi peatonal que parte de la Praça da República, se llega al
Rest. A Ceia. Sopa do dia,
alheira de caza y pastel de galletas, 14.40€. Mitad bodega, mitad restaurante, es un local agradable y bien atendido donde se sirven deliciosos platos, variados y copiosos, que lo convierten en motivo suficiente para venir a Braga. La sopa del dia parece increíble que solo cueste 1.5€, y la
alheira, una espectacular salchicha con textura de morcilla.
La última parada del bus nº 2 (1.45€) a unos 5km del centro en la colina del Monte Espinho, es
Bom Jesus do Monte, uno de
los mayores centros de peregrinación de Portugal. Fue encargada por el arzobispo Maura-Teles y tras 60 años de construcción se inauguró en 1783. Todo el entorno del Santuario es un parque natural, en el que hay varios hoteles, cuidados jardines, varias capillas, fuentes, estatuas, una cueva natural, un lago donde se puede dar un paseo en barca, y un mirador con vistas espectaculares de toda la ciudad. Desde la parada del autobús para acceder a la iglesia, a 116 mts de altitud, lo mejor es subir en el remontador (1.10€ subir, 2€ ida y vuelta), y descender por su monumental escalinata atravesando un frondoso bosque salpicado de fuentes, esculturas, y capillas barrocas con escenas de la vida de Cristo.
Rest. Anjo Verde. Vegetariano en Pza Velha, un pequeño descanso para el estómago. Lleno a rebosar. Surtido de croquetas, hamburguesa de tofu con arroz integral, zumo de manzana y mango, y mousse de chocolate blanco, 13.20€