Volamos con
Swiss via Zurich. Trato excelente, asientos amplios y cómodos, y reparto de chocolatinas. Escala de 45 min en Dubai, donde ni tan siquiera bajamos del avión. Al despegar el piloto nos anuncia "
the beautiful tower on your right", el recién estrenado Burj Dubai. Todos intentamos verla haciendo oídos sordos de la azafata que nos recuerda que estamos despegando.
Aterrizamos en
Muscat International Airport sobre la hora prevista. La gestión del visado es bastante rápida. Seis rials pagaderos en dólares o euros (conversión algo arbitraria), pero no con tarjeta de crédito como dice la guía. Un consejo, si pensáis consumir alcohol durante vuestra estancia en Oman, sobre todo algo mas fuerte que cerveza, mejor que lo compréis en el duty free del aeropuerto porque luego os va a resultar prácticamente imposible de encontrar, o lo pagareis a precios prohibitivos en algún hotel para turistas.
22:00 Al salir de la terminal hay un oficina de
taxis de
prepago, 8 rials hasta Muttrah, 32 km, 25 minutos. La autopista
esta impecable, el coche es amplísimo, el chofer lleva
turbante, y estamos a unos agradables 20º de temperatura
en el mes de enero.
Muscat es una sucesión de pueblos y barrios que se prolonga durante
50 km de costa. Sin adentrarse nunca mas de 3-4 kms
hacia el interior, forman un estrecho collar
entre el mar y una rocosa barrera de pequeñas montañas.
A pesar de sus rotondas y amplias avenidas, la ciudad respira una aire tradicional, hay pocos edificios altos, y muchos
tienen cúpulas doradas o arabescos en las ventanas. Realmente no hay mucho que ver en
Muscat. Esta el Sultan
Palace (
Al-Alam Palace),
un par de razonablemente atractivas mezquitas, (
Beit Al-Fransi y
Beit al-Zawawi), las antiguas embajadas francesa y británica que albergan museos,
un pequeño souq, y dos fortalezas portuguesas del siglo XVI bien conservadas.
Muttrah Hotel, 25 rials. Habitación doble, enorme, limpia y luminosa, aunque sin vistas. Baño completo, mampara, jabón, gel, champú, body milk, papel higiénico (estamos en un país árabe), y toallas. Hay mueble bar y aire acondicionado. Ubicado en una zona silenciosa y tranquila. En la planta baja hay un restaurante hindú, donde ofrecen desayuno buffet libre, 3 rials por persona (huevos, patatas, tostadas, mantequilla, café, te, mermelada, un poco de todo). Dispone de un extenso parking, y ofrece conexión a Internet, 1h/5h/24H cuesta 1/3/10 rials. Se admiten tarjetas de crédito.
10.30 A diez minutos del
hotel, justo detrás de la
corniche, esta el viejo
souq (mercado).
En este pequeño laberinto de estrechas callejuelas puede
encontrarse casi de todo: incienso, piezas de oro de 24 kilates,
antigüedades, vajillas de porcelana y vasos de plástico, así como
multitud de sastres y casas de cambio. Es un buen lugar donde
comprar souvenirs:
khanjars (cuchillos curvos tradicionales), cafeteras, joyería beduina o
ropa tradicional omaní. Hay poco movimiento, su momento de apogeo es al atardecer. Los precios
son negociables, y los tenderos aceptan un "no gracias" sin mayores problemas. Atravesando el
souq llegamos a la
corniche. Algunos dhows
están varados frente al paseo.
A mano izquierda el
gold souq (mercado del oro), blancas fachadas de las antiguas casas de mercaderes, alguna mezquita, y el mercado de pescado frente al
hotel Marina. Dirección
Old Muscat, pasamos frente al
Muttrah
Fort, construido por los portugueses en 1580. Aunque cerrado al público, es posible subir hasta una torre de vigilancia desde la que se contempla el puerto y la bahía.
Siguiendo el paseo marítimo llegamos al
goldfish monument,
uno de estos monumentos infantiles que tanto abundan en las calles de Muscat. Delfines,
espadas, cántaros de agua, quemadores de incienso y otras rarezas de diseños
pueriles decoran avenidas y rotondas en todo el país.
Paseando por la
corniche vemos un par de antiguas
torres de vigilancia portuguesas,
Al-Riyam Park, la
Atalaya (el quemador de incienso mas grande del mundo, y sin duda el monumento mas extravagante de Omán) desde donde se tienen unas fantásticas vistas del puerto,
Kalbuh Bay Park, y siguiendo Al Bahri rd.
Muscat Gate, una de las puertas que formaba parte de la antigua muralla y que da acceso a
Old Muscat. Hoy día alberga un museo que explora la historia de la ciudad desde sus inicios hasta la actualidad.
14:00
Muscat light restaurant & coffee
shop. Zumo
de naranja, y de limón con menta, curry de pollo, pescado
binjari,
te y café. 5,20 rials. El
arabic coffee lo sirven con dátiles.
Comida
normal, pero en la terraza a la sombrita se esta bien, y la verdad
es que hay muy poco donde elegir. En la zona apenas se ven restaurantes, tan solo lavanderías, peluquerías
y farmacias.
En
Old Muscat, el Muscat historico, destaca sobre todo el
Palacio
del Sultán (Al-Alam), un edificio puramente ceremonial, ya que
el sultán reside en otro palacio cerca de Seeb lejos de los ojos del público. Se ecnuentra en una
pequeña ensenada flanqueado por dos fuertes portugueses del siglo XVI,
Jalali (antigua prision hasta 1970) y
Merani Fort. El acceso al palacio y las fortalezas esta vetado al público. Cerca están los museos de
Bait Al Zubair (coleccion privada de arte y utensilios tradicionales) y Bait Fransa (donde se da cuenta de las relaciones Omaní-Francesas desde el siglo XVIII).
Taxi hasta Ruwi por 4 rials (dos desde Sultan Palace a Mutrah, y dos mas desde Mutrah a Ruwi).
Ruwi, el barrio hindú, es el centro financiero y el lugar donde se concentran los edificios mas altos del país. Las calles rebosan movimiento, y hay una mayor variedad
de negocios y restaurantes. También esta aquí la
bus
station (
horarios)
. Billete a Dubai (5,5 rials) con
ONTC.
Taxi
a
Qurum (6 rials), un area residencial
rodeada de grandes centros comerciales. Parece una buena zona para
un día de playa sin salir de la ciudad, pero los lunes por la noche
hay poco ambiente. El centro comercial mas grande es
Sabco
Centre. Aire acondicionado a tope, y tiendas por todas par-
tes: salones de belleza, spas, ropa moderna y tradicional, deportes,
joyerías, pastelerías, restauran-tes...
19:30
Automatic restaurant, Al-Qurum
rd, detrás de Sabco. Restaurante libanés bien llevado por
libaneses. Humus, falafel, samosa de espinacas, 2 ayran y crema
caramelo, por 7 rials. Taxi a Muttrah
5 rials. En un
supermercado a 200 mts
del hotel compramos nuestro desayuno de mañana: agua 1 1/2
lt, chocolatinas, pan con pasas, yoghurt y batido de chocolate,
910 baizas.
08:00 Llegamos al
Oman
Dive Center. Tardamos
unos 20 minutos en taxi, 4 rials. Realizan salidas diarias para
snorkel y
buceo a las 08:00 y a mediodía;
y avistamiento de delfines solo a las 08:00. El
Dolphins trip de hoy esta lleno, así que solo haremos
snorkel (16 rials/pp). Pedimos trajes de neopreno, es invierno y la temperatura
del agua ronda los 20º. Dejamos la ropa en una taquilla
(candado 2 rials de depósito). Alcanzamos la barca andando, el
agua es tan poco profunda que ni viene a recogernos. Tras media
hora dando unos botes de cojones, fondeamos junto a una bolla donde
se lanzan al agua los submarinistas. A los que hacemos
snorkel
nos acercan un poco mas a la orilla.
Apenas
hay coral, pero hay bastantes peces. Pequeños peces tropicales
de colores, tortugas, mantas rayadas y sepias. Estamos alrededor
de una hora antes de movernos a otro punto de inmersión.
La mar movida que hacia cuando salimos se ha convertido en autentica
mala mar. Estamos una hora mas y nos volvemos. El mar esta realmente
encabritado. El viaje de vuelta es una sucesión de saltos
y fuertes sacudidas, y el agua entrando a raudales en la barca.
Ya en el resort, nos duchamos, cambiamos y comemos alli mismo.
Spaguetti boloñesa, ensalada de tomate, dos refrescos y dos
tés, 9,3 rials. En la fantástica playa privada del
hotel nos relajamos y bronceamos un poco antes de volver a Muttrah.
El taxista se pierde de vuelta a Muttrah, 5 rials. La
mayoría son un desastre, que no conocen mas que las rotondas y cuatro avenidas grandes, seguramente acostumbrados a que el pasaje les
guíe entre las calles secundarias. Pero cuando esto no es así,
como es nuestro caso o el de cualquier turista, pueden tirarse
horas para encontrar uno de los escasos hoteles de la ciudad.
Alquilar
un coche en Oman es relativamente barato, la gasolina esta por
los suelos, las carreteras son buenas, y las señales están
en inglés. Ello unido al escaso transporte público, lo
convierten en la forma mas común entre los turistas para moverse
por el país. Un amigo del recepcionista del hotel tiene una empresa
de
coches de alquiler. Trece rials diarios. Se
trata de un Nissan Hiiva del 2009, con cambio automático, seguro
a todo riesgo y 200km por día. Damos una vuelta conduciendo
Rosa, ante la incredulidad y acojone del dueño, para
probar el cambio automático. Todo controlado. A pesar de
no haber pagado por no tener efectivo, el tío nos da las
llaves y nos dice que nos lo llevemos esta misma noche.
19:00
El
souq esta algo mas animado que por la mañana
pero tampoco perdemos mucho tiempo en él, parece muy turístico
y de momento no queremos comprar nada. Paseando por la
corniche
llegamos al
Hotel Marina (35 rials) al final del paseo, frente
al
fish market. Cenamos en el restaurante hindú
que tienen en la terraza,
Al Bamboo (12.4 rials). Buena comida
aunque muy picante y especiada. Las vistas del paseo y el puerto
son fantásticas: corniche, castillo y quemador de incienso
todo en uno e iluminado.
En el camino de vuelta nos perdemos y nos metemos en un barrio de calles estrechas y sin asfaltar del que amablemente nos sacan dos chicas, no sin antes ofrecernos agua y cualquier cosa que necesitemos en la puerta de su casa. De hecho su madre nos acompaña con ellas hasta que abandonamos el barrio.
En el hotel nos conectamos a internet para contar novedades.
17:00 Después de pasar casi todo el día en Wadi
Shab, tomamos autopista a Muttrah (714 km). El 90% esta acabada y
llegamos en dos horas. De pura chiripa no nos hacemos un lio en
las rotondas y encontramos el
Muttrah Hotel (25 rials) en un periquete. Ponemos 2 rials
de gasolina, 1lt=120 baizas, para devolverlo tal como nos lo entregó,
con medio deposito.
Cenamos en
Al Amazon Rest, mientras esperamos
al dueño del coche para que nos devuelva la fianza. Parrillada
de carne, humus de garbanzos y de berenjenas, ensalada, sopa de
cordero, zumo de naranja y te, 5.8 rials.