Cabecera

Albania

Porqué

ItinerarioAlbania es un destino perfecto para una escapada de siete días, es un país barato y pequeño (mas que Cataluña), los vuelos son cortos y relativamente económicos, ofrece gran variedad paisajística y cultural, y tiene un interesante pasado reciente.

Muy a su pesar, veinticinco años después de haber roto con el comunismo, Albania sigue siendo un destino turístico desconocido para el gran público, castigado por su fama de país pobre, aislado, y patria de mafiosos. Albania es la gran desconocida, hermosa, pequeña, diferente, variada, segura, hospitalaria, un oasis todavía virgen en Europa, donde disfrutar sin necesidad de rascarse el bolsillo. Albania no tiene nada que envidiar a ninguno de sus vecinos balcánicos, más turísticos y masificados: posee espléndidos playas en el Adriático, impresionantes paisajes de montaña, restos arqueológicos griegos y romanos, castillos venecianos, iglesias bizantinas, mezquitas y tekkes centenarias, barrios enteros de casas tradicionales de origen otomano, o pueblos perdidos con tradiciones medievales. Pese a todos estos atractivos, el poco turismo que llega a Albania es básicamente mochilero, y será difícil que el turismo de masas llegue hasta que las infraestructuras mejoren.

Para moverse lo ideal son las furgonetas. Solo salen cuando están llenas, así que su horario es bastante flexible, pero por otro lado, llegan a todas partes, y paran en cualquier lugar de la ruta con solo pedírselo al conductor o levantando la mano al verlas pasar. Los autobuses son más lentos, más baratos, y de horarios más rígidos, pero son más escasos. Hay que informarse bien en el hotel de los horarios y lugares de salida, ya que no existen estaciones. Las carreteras son lentas y los trayectos largos, las distancias no se deben contar en kilómetros si no en horas, 50 km/h es un cálculo realista, y en algunos casos, demasiado optimista.

La oferta hotelera, al menos a nivel mochilero, es amplia. Abundan los albergues y hoteles baratos con habitaciones compartidas a partir de 10€, y habitaciones dobles desde 25€. Suelen compartir baño, duchas, una pequeña cocina, wifi y la mayoría incluye desayuno en el precio. Otra opción son habitaciones en casas particulares, que los dueños ofrecen en las paradas de autobús. La red wifi está ampliamente distribuida por todo el país, muchos locales y lugares públicos ofrecen conexiones gratuitas, como el paseo marítimo de Sarandë, por ejemplo, donde hay potencia suficiente para mantener un Skype.

Una vez allí, no paséis por alto uno de los "atractivos turísticos" más curiosos de Albania, los bunkers, construidos de forma obsesiva por orden del dictador Enver Hoxha, para proteger al país de sus enemigos imaginarios. Estos antiestéticos hongos de hormigón están por todas partes, son visibles en márgenes de carreteras, desde el autobús, en las ciudades, en el campo, en la playa, cada rincón de Albania tiene el suyo, se calcula que fueron construidos unos 750.000, 24 por km2, uno por cada cuatro habitantes. Actualmente abandonados, algunos se han reconvertido en viviendas, tiendas o corrales para el ganado.
Playa de Sarandë Ciudad vieja de Gjirokastër Ruinas de la antigua ciudad de Butrint Mangalem, barrio antiguo tradicionalmente musulman en Berat Alrededores del Blue Eye Spring, cerca de Sarandë y Gjirokastër

Tirana Berat Sarandë Gjirokastër