El Lago de Como es el segundo de los tres grandes lagos del norte de Italia que visitamos. No se diferencia mucho de los otros, rodeado de altas y boscosas montañas, aguas tranquilas y un montón de preciosos pueblecitos para visitar. Tal vez debido a su cercanía de Milán, a su clima mediterráneo, a su tranquilidad, no sé porque, pero millonarios y celebridades de todo el mundo han escogido esta zona para comprar algunas de sus villas más exclusivas. Con el coche es fácil recorrer su perímetro por carretera, deteniéndote en los lugares más interesantes, depende de los días que tengas. Otra opción es combinarlo con los ferries que circulan de manera regular por la zona.
Como, fundada por los romanos en el año 196 aC, es la ciudad más importante del lago. Conserva parte de su muralla medieval, y la basílica del Duomo, construida entre los siglos XIV y XVIII. Desde la plaza Gasperi sube un funicular hasta el pueblecito de Brunate, desde donde se tienen unas vistas maravillosas del lago y el pueblo, En la Piazza Gavour durante las fiestas de Navidad se monta un entretenido mercadillo.
Ostello Bello Lake Como. Albergue con buen ambiente, buenos servicios y buena ubicación, a 100 mts del estadio de fútbol y las orillas del lago, con bastante espacio para aparcar en la zona. Desayuno incluido. Habitación con baño privado y vistas a un patio interior ajardinado donde no se oye ni una mosca. Dispone de bar restaurante, zona de relax, cocina plenamente equipada y parrillas.

El lago tiene forma de Y invertida, en esa estrecha franja de tierra que se adentra en el lago, se encuentra
Bellagio, un pequeño pueblo de empedradas calles estrechas, callejuelas empinadas y bellos jardines, donde en el siglo XIX la nobleza y la burguesía italiana comenzó a establecer sus majestuosas villas y mansiones. Hoy se han convertido en refugio de millonarios u hoteles de lujo.
Varenna, accesible en barco desde Bellagio, es un pueblo pesquero con dos interesantes iglesias del siglo XII y XIII. En las calles adoquinadas paralelas al lago hay miradores panorámicos entre villas históricas, arcos de piedra, empinadas escaleras, flores, agua, tiendas de souvenirs y productos artesanales, que ofrecen estupendas vistas del lago. Hay una pequeña playa, algunos jardines, y casas de colores pastel que ofrecen una imagen de postal cuando te acercas al pueblo con el ferry.
Cernobbio fue un pequeño y tranquilo pueblo de pescadores hasta que en el siglo XIX las familias ricas de Milán escogieron esta localidad como residencia estival, edificando algunas de las villas más hermosas del lago. El pueblo creció en importancia y desarrollo al implantar en él una importante fábrica de seda, propiedad de uno de los veraneantes. Hoy es un centro turístico más del lago, bonito centro histórico medieval, pintoresco puerto y una pequeña playa.
Tremezzo es conocido sobre todo gracias a Villa Carlota, una de las villas más impresionantes del lago, una imponente residencia neoclásica construida en 1843 como regalo de boda para Carlota de Prusia. El paseo paralelo al lago ofrece vistas a otras elegantes mansiones de color pastel, con majestuosas ventanas, balcones de hierro y fachadas en forma de arco, muchas de ellas reconvertidas en hoteles, tiendas o restaurantes.
Risto Bar Company, Griante. Restaurante familiar, frente al lago, en las afueras de Tremezzo. Pasta, carpaccio, nada nuevo, pero muy bueno.