

A siete kilometros de Veliko Tarnovo, y con espectaculares vistas del valle circundante, se encuentra el
Monasterio Preobrazhenski (acceso 4 lev) o Monasterio de la Transfiguración, fundado en el siglo XI. Saqueado e incendiado en diversas ocasiones por los otomanos, y finalmente destruido por completo, en 1.825 se inicia una restauración que lo deja tal como lo vemos hoy en día, que duró siete años. Es una iglesia en forma de cruz con tres ábsides y nartex abierto. Los frescos ocupan todos los muros exteriores de la iglesia, así como el techo y paredes interiores. Unos 30 años mas tarde se añadió el campanario y los edificios residenciales. Aún pueden verse una cuantas rocas de grandes dimensiones que se desprendieron del acantilado en 1.991 y que estuvieron a punto de acabar con el complejo.
En el Parque Natural de Balgarka, a orillas del río Andaka, rodeado de un frondoso bosque se encuentra el Monasterio Dryanovo (acceso gratuito), fundado en el siglo XII, aunque su arquitectura actual data del siglo XIX. Fue un importante centro literario y cultural, así como refugio de revolucionarios mientras preparaban un levantamiento fallido contra el imperio otomano (hay un osario con restos de algunos de ellos). Consta de varios edificios residenciales y de la iglesia de San Miguel Arcángel, donde están celebrando un bautizo ortodoxo cuando entramos. De hecho nos pareció un lugar donde las familias vinieran a pasar el día, hay varias rutas cortas por el parque que se inician en él, un par de restaurantes, parking y una buena dosis de tiendas de souvenirs. También hay una cueva (acceso 10 lev) donde se puede hacer una visita guiada de 30 minutos.

La noche la pasaremos en
Hisiriya, una ciudad balneario 40 km al norte de Plovdiv, donde abundan las fuentes de aguas termales y minerales. Los romanos ya descubrieron los poderes curativos de estas aguas, y en la ruinas de la ciudad, además de basílicas, necrópolis, un anfiteatro y edificios de diferente índole, se pueden observar los restos de unas antiguas termas. Cansados de tantos kilometros, pasamos toda la tarde ociosos en el spa del hotel donde nos hospedamos.


Spa Hotel Augusta, 180 lev. Enorme complejo con capacidad para 600 huéspedes. El precio incluye acceso completo a las piscinas interiores y exteriores, saunas, baños de vapor, y algunos tratamientos terapéuticos. Habitación doble con baño privado, terraza con vistas a la piscina al aire libre y sus alrededores, parking y desayuno incluido.
Nacional, bonito patio con fuentes de agua. Cocina búlgara tradicional y moderna, muy original. Mix de ensaladas de hojas con filete de pato, fresas, pipas de calabaza, cáñamo, sésamo tostado y reducción de balsámico; bacon casero con puerros y pan horneado;
frijoles a la búlgara con champiñones
porcini en una olla;
pan,
Leffe blonde y
Leffe dark, 58 lev.