San Francisco me pareció un destino absolutamente sobre valorado. El centro está visto en un día, y aún tienes problemas para llenar la tarde. Hordas de turistas que pasean entre tiendas y tranvías de madera en barrios convertidos en parques temáticos moldeados para exprimir los bolsillos del visitante, algunas zonas de la ciudad no son muy distintas de Disneyland...
El
downtown es bastante compacto y es fácil recorrerlo andando.
Market Street es la calle con más tránsito de la ciudad. Entre la 4th y la 7th está llena de tiendas, hoteles y restaurantes. Pero el corazón de la ciudad, y su principal zona comercial es
Union Square. En el Distrito Financiero destacan un
pequeño bosque de secuoyas ubicado entre los altos edificios y rascacielos, y la
Transamerica Pyramid, el edificio más alto de San Francisco.
Chinatown es la comunidad china más grande y más antigua fuera de Asia, pero está tan lleno de tiendas de souvenirs para turistas que es difícil disfrutar su esencia. Aquí llama la atención
Columbus Tower, un
Flatiron de color verde propiedad de Francis Ford Coppola.

Construido sobre 43 colinas algunos barrios tienen calles imposibles llenas de empinadas cuestas, es por ello que el
tranvía es el medio de transporte más práctico y cómodo para alejarse del centro.
Sobre una de esas colinas, tras una saludable caminata está
Coit Tower, una torre blanca y reluciente dedicada a los bomberos de San Francisco, que ofrece sin duda las mejores vistas panorámicas de la ciudad. En la planta baja hay unos murales estilo Diego Rivera.
El barrio de
Fisherman's Wharf, que abarca varios de los antiguos muelles, se ha convertido en una de las principales atracciones turísticas de la ciudad. Además de contar con un animado ambiente nocturno, está llena de restaurantes, tiendas, terrazas, museos, artistas callejeros, y en
Pier 39, además de varias terrazas agradables donde tomar comida americana y beber cerveza de barril, habita de manera estable una colonia de
leones marinos.


En
San Francisco Whale Tours contratamos una excursión de 5h (de 08:00 a 13:00, 80$) para ver ballenas. Anuncian que el día anterior vieron ballenas
humpbak y grises, pero nosotros no conseguimos ver más que delfines y pájaros. Todo está muy bien organizado, entre la tripulación una naturalista nos da explicaciones del ecosistema de la bahia durante el viaje, el barco es cómodo y el paseo agradable, pero sin ver animales parece caro, pero con la naturaleza nunca se sabe. El barco es ideal para ver uno de los puentes más famosos del mundo, el
Golden Gate Bridge.
Aida Hotel, 60$, desayuno incluido (donuts). Nivel medio, moqueta,
wifi gratuito, café y té gratis todo el día. Lo mejor que tiene sin duda es su ubicación, en Market con la 7th, frente al tranvía F que lleva al Pier 39 atravesando el
downtown, y el bus 70 que lleva a Sausalito. No tiene parquing pero hay uno en la calle de detrás, 25$ día y noche, 15$ solo la noche.
Y al otro lado del Golden Gate Bridge se encuentra
Sausalito, un precioso pueblo entre una colina y el mar, que adquirió fama tras la Segunda Guerra Mundial como colonia de artistas y bohemios que vivían en casas flotantes sobre la bahía. Hoy en día está lleno de tiendas, restaurantes y cafeterías, y se ha convertido en otra trampa caza turistas.