Sri Lanka

Último destino Kandy, ultima capital de un reino singalés hasta que cayó en manos de los ingleses en 1815, después de haber aguantado durante años las hostilidades de holandeses y portugueses. Pero su importancia para nosotros viene de albergar el Templo del Diente Sagrado, uno de los santuarios más sagrados del budismo. El centro turístico se ordena alrededor de Kandy Lake, un lago artificial construido en 1807 y que a través de una presa regulaba el riego en los campos de la zona. Tiene unos 3,5 km de perímetro y es un lugar agradable para dar un paseo.

Cuanto más cerca este el hotel del lago, mejor. Lakewood Residence, 16.000 con vistas al lago. Habitación doble con baño privado, aire acondicionado, servicio de té, terraza, piscina cubierta, parquing para el tuktuk y desayuno incluido muy completo. Balaji Dosai, las dos noches cenamos en este local, frente al Templo del Diente. Deliciosas dosas a precios populares.

Templo del Diente de Budha, acceso 2.000 SLR, imprescindible guía sino no te enteras de nada, 2.000 SLR. Hay que visitarlo durante las horas de puja, a las 05:30, 09:30 o 18:30, que es cuándo durante una hora abren la sala donde está el diente. En el complejo hay al menos una docena de templos, pero el principal es un templo de madera con techo dorado que alberga la reliquia budista más sagrada del país, un diente de Buda que fue salvado de la pira funeraria. Durante las horas de puja, se abre la sala donde se encuentra guardado, aunque no se puede entrar, solo mirar desde la puerta. De hecho, ni tan siquiera se ve, ya que se esconde en el interior de un cofre dorado con forma de dagoba. A pesar de todo los fieles desfilan frente a la puerta con devoción, entregando ofrendas florales, o comida y vestimentas para los monjes.

Hoy es 21 de junio, el último barco con gasolina llegó a Sri Lanka el día 19 y no está previsto que llegue ningún otro hasta el día 23. El caos en las gasolineras ha crecido de manera exponencial, donde antes había 200 personas haciendo cola ahora hay 2.000, que llevan cuatro días aguardando para llenar el tuktuk con nueve litros de gasolina. Mañana tenemos que llegar a Negombo, nuestro avión sale la madrugada del 23, nos queda un cuarto de depósito más un bidón de cinco litros; son solo 110 km pero mejor ser conservador. Así que ayer contactamos con un local para alquilar su tuktuk durante todo el día (25$), y visitar lo más destacado de los alrededores.

Para empezar tres templos históricos construidos en el siglo XIV. Gadaladeniya Vihara (acceso 500 SLR), templo budista construido sobre una gran roca natural. Alberga una hermosa estatua de Buda sentado enmarcado en un arco de dragón y flanqueado por dos estatuas de Buda de pie. Hay otro santuario con techo alado y custodiado por una imagen de Vishnu, y un par de edificios más con tallas de madera.

Lankatilaka Vihara, es el más espectacular. Se accede al complejo por unos escalones esculpidos en la roca que acban en un arco de piedra. Está dividido en una sección budista y otra hindú. Los edificios principales albergan templos en su interior con imágenes de Budha o dioses hindús, y las paredes están completamente cubiertas de murales. Hay ademas un Bo Tree y una dagoba.

El último es Embekka Devalaya (acceso 500 SLR), dedicado a un dios hindú. Lo primero que llama la atención es el porche de madera, de gran altura y con tallas esculpidas en los pilares, que representan cisnes, águilas bicéfalas, bailarinas, luchadores....

Perennizara Botanic Gardens, acceso 2.000 SLR. Un lugar ideal para escapar del caos de circulación y ruido que hay en el centro de Kandy. Aunque sus orígenes datan de 1.371 el aspecto actual empieza a gestarse en 1.844. Con una extensión de 60 hectáreas se trata de uno de los jardines más grandes del país, incluye 4.000 especies de plantas, una colección de 300 variedades de orquídeas, largas avenidas de palmeras y cañas de bambú de hasta 40 mts de altura.

Por último, visitamos Sri Maha Bodhi Viharaya (acceso 250 SLR), un templo en lo alto de una colina, conocido por su estatua gigante de Buda sentado meditando, que alcanza los 26 mts de altura. Lo curioso de está estatua es que, por unas escaleras ubicadas en su espalda, puede subirse hasta la altura de los hombros.